Diálogo sobre las políticas públicas de la administración de justicia sostuvo el ministro de Justicia el 20 de septiembre, en la Sede Norte.
El Ministro presentó su punto de vista sobre la situación de la justicia en Colombia y algunos de los propósitos de su gestión frente al Ministerio. La intervención del Ministro Esguerra fue precedida por Setfan Jost, representante de la KAS en Colombia, quien hizo mención al Estado de Derecho como un aspecto fundamental para la consolidación de la democracia. Consideró, el señor Jost, que "un país sin justicia es una tierra sin agua". A continuación, Rodrigo Pombo Cajiao, Presidente de la Corporación Pensamiento Siglo XXI, manifestó que en Colombia no hay Justicia y resaltó la importancia de hacerle seguimiento a la reforma que fue presentada por el Gobierno. En su sentir, el problema no es por falta de leyes y, mucho menos, por presupuesto; es, más bien, un problema estructural.
El Ministro inició su presentación con una reflexión sobre la situación actual de la justicia en Colombia y cómo se caracteriza por su falta de prontitud y cumplimiento. Sin embargo, él cree que el escenario no es tan crítico, pues Colombia tiene una justicia independiente, vertical, a diferencia de otros países donde la justicia la hacen personas que satisfacen los intereses de un gobierno. Entre las principales, fallas en materia de la administración de justicia, identificó la morosidad de los procesos: de 180 países, Colombia ocupa el puesto 175, pues los juicios pueden durar de 15 a 16 años en las dos instancias ordinarias.
Respecto a la tutela, expresó su intención de defender la institución, máxime cuando él fue uno de los gestores de la iniciativa en la Asamblea Constituyente de 1991. La reforma a la justicia desea introducir algunos cambios, en especial sobre la tutela contra providencias judiciales, lo que considera conveniente analizar. Otro de los puntos a los que se quiere llegar con la reforma es a una organización administrativa con un esquema gerencial en el que haya una junta directiva que le de autonomía, similar a la del Banco de la Republica. Respecto a los fueros constitucionales, consideró que se les debe aplicar el sistema acusatorio siguiendo el ejemplo de la mayoría de países. En cuanto a la instancia de investigación, consideró que ésta debe estar vinculada pero separada a la de juzgamiento; así, la reforma pretende dar más fuerza a la Fiscalía como órgano investigador.
También se planteó la importancia de analizar la iniciativa de dar funciones jurisdiccionales a personas que no pertenecen a la rama judicial, con el fin de agilizar los procesos. Para esto habría que organizar el arbitraje nacional e internacional y replantear el tema de los auxiliares de la justicia, que en este momento no son eficaces. Además, dijo que es muy importante modificar el código de ética del abogado para hacer de los profesionales personas más adecuadas para manejar la justicia en Colombia.
Por último, en representación de la Universidad Central, el Director del Departamento de Derecho, José Vicente Barreto, manifestó su apoyo al Ministro de Justicia y habló sobre la importancia de prestar atención a la reforma y aseveró que la educación es un elemento fundamental para mejorar el sistema de justicia en Colombia y el proyecto de reforma presentado en la Cámara de Representantes para el ejercicio de la abogacía.
El evento contó con una nutrida asistencia. En la sala se encontraban, además, Enrique Gómez Hurtado y Carlos Holguín Sardi, miembros de la Asamblea Constituyente de 1991, junto con docentes, estudiantes y funcionarios del sector justicia.