Entre el 31 de mayo y el 4 de junio se realizaron campeonatos nacionales de ajedrez, con el auspicio de la Federación Colombiana de Ajedrez, Fecodaz y la Liga Distrital.
os participantes pertenecían a las categorías sub 10, sub 14, y sub 18 en las dos ramas: masculina y femenina. Para cada campeonato fueron convocados 10 jugadores, que se enfrentaron por el sistema de liga (todos contra todos) en una sola vuelta. Los resultados de estas competencias sirvieron para clasificar a los Panamericanos Juveniles, que se celebrarán en Cali durante el mes de julio de 2011. Los jugadores que se enfrentaron en esta oportunidad fueron previamente seleccionados en torneos regionales, programados por la Fecodaz.
La lucha por los primeros lugares fue intensa y, en casi todos los torneos, los ganadores se impusieron por un estrecho margen, excepto en la sub 18 masculina, categoría en la que el dominio del valluno Cristhian Camilo Ríos fue apabullante. Ríos ganó todas sus partidas y tomó una ventaja de 3.5 puntos sobre sus inmediatos seguidores. En la sub 10 masculina, también con comodidad, ganó el boyacense Camilo Corredor, quien acumuló 7.5 puntos, 1.5 más que sus inmediatos seguidores, aunque en este caso Camilo perdió una partida con el valluno Juan David Muñoz. Fue más estrecho el margen en la sub 14, donde el bogotano Joshua Ruiz impuso su experiencia, pero dio posibilidades a sus rivales al perder con el antioqueño Juan Manuel Posada y al ceder unas tablas con Guillermo Blandón, también de Antioquia.
En la rama femenina, las luchas fueron más cerradas en todos los grupos. En la sub 18, la antioqueña Yurani Loaiza derrotó a todas sus rivales, excepto a la cundinamarquesa Paula Rodríguez, quien a la postre ocupó el segundo lugar. En la sub 14, se destacó la santandereana María Paula Hernández al coronarse campeona invicta. En la sub 10 dominaron las jugadoras del Valle, Valentina Cayón y Mariana Mejía; ambas empataron con los mismos 8 puntos el primer lugar pero, en el desempate, la corona le fue otorgada a Valentina.
Estos nacionales lograron congregar muchos de los ajedrecistas que representan el futuro del deporte ciencia en el país y fueron un termómetro para medir los trabajos de los dirigentes y los entrenadores de las diversas regiones de la nación.