La proyección del documental Dear president Obama y un conversatorio con su director, Jon Bowermaster, cerraron la Muestra Internacional de Cine Ambiental Planet On, en la UC.
El documental, estrenado en 2016, fue el encargado de cerrar la Muestra y abrir el debate académico en el Auditorio Jorge Enrique Molina de la Universidad Central, el pasado 15 de septiembre. Al evento asistieron estudiantes y docentes de la Universidad Central, principalmente de su pregrado de Ingeniería Ambiental, actualmente en cabeza de la profesora Sandra Milena Mejía Hoy.
Dear president Obama retrata las consecuencias humanas y medioambientales que desencadenó el auge de la extracción de gas natural por fracturación hidráulica o fracking, impulsada por el gobierno del expresidente norteamericano Barak Obama.
Estos efectos incluyen movimientos telúricos, contaminación de fuentes hídricas subterráneas que terminan por afectar a la población; manejo inadecuado de desechos tóxicos que amenazan la salud de los pobladores; devaluación de las tierras y secuelas de por vida para extrabajadores de los pozos de extracción que proliferaron por todo el país.
Dear president también revela la paradoja de la apuesta “verde” del gobierno Obama, que en su afán por eliminar la explotación de petróleo sustituyéndola por la de gas terminó por causar daños irreversibles al suelo y a cerca de 17.000 ciudadanos.
El panel que siguió a la proyección contó con la participación de Manuel Rodríguez Becerra, exministro de Ambiente, y Carlos Caballero Argáez, exministro de Minas y Energía como invitados especiales, junto a la profesora Sandra Mejía, directora del pregrado de Ingeniería Ambiental.
Los expertos dialogaron con Bowermaster, director de la película, sobre las condiciones geográficas, económicas y ambientales de Colombia, en relación con los procesos de transición a energías limpias, una necesidad apremiante para todos los países en el contexto de la grave crisis medioambiental que afronta el planeta, y para la que el fracking, definitivamente, no es una alternativa.
Durante el encuentro, también se hizo referencia a la imperiosa necesidad de que los gobiernos se tracen planes claros en ese sentido, para así, lograr la transición en el menor tiempo posible. “Sabemos que Estados Unidos podría cambiar todo su modelo a energías limpias para 2050; el auge de los combustibles fósiles no tiene más de 20 años, pero no queremos cambiarlo porque es lo que sabemos hacer”, señaló Bowermaster.
En este punto, también se destacó el papel de los movimientos sociales y el hecho de que los ciudadanos se organicen para ser oídos por sus gobernantes, pues gracias a acciones de ese tipo, fue posible la prohibición del fracking en New York, asentada sobre la reserva de gas más grande de EE. UU a la fecha.
Pese a que “es un tema de justicia ambiental en el que muchos votos no cuentan”, como afirmó el experto, la organización de la sociedad civil y el hecho de que las personas conozcan las consecuencias ambientales de esta práctica, resultan ser una buena herramienta frente al sigilo con el que actúan las industrias, a la hora de continuar la extracción de combustibles fósiles en todo el mundo.
“En Colombia, siete consultas populares le han dicho ‘no’ a la minería y al petróleo”, puntualizó Caballero.
Por su parte, la profesora Sandra Mejía, expresó la postura de la Universidad Central frente a esta práctica, exponiendo, entre otros argumentos, el hecho de que todavía no se conoce del todo el alcance y el impacto de esta actividad en términos medioambientales para el país.
Para Bowermaster, quien ha dirigido casi una veintena de documentales alrededor del mundo, la única forma de solución es dejar los combustibles fósiles en donde están, bajo tierra, y que todos los países estén alineados. “Irlanda está a punto de prohibir el fracking, Alemania lo está considerando. Nuestro documental busca educar a las personas y es una pequeña luz roja titilando y diciendo: piénselo un poco antes de empezar a hacer fracking en su jardín”.