Durante la jornada “La Universidad Central se piensa” la comunidad académica reflexionó sobre las dinámicas que debe asumir para aportar a las demandas actuales de la educación superior.
“La Universidad Central se piensa” es el primero de muchos espacios de discusión y participación en torno a los procesos de identificación, evaluación y reestructuración de las condiciones académicas y organizacionales actuales, y las proyecciones futuras, a propósito del diseño de la Reforma Académica de la Institución.
Óscar Herrera, vicerrector académico, explicó que el diseño de la Reforma Académica surge como una necesidad expresada por los diferentes actores de la Universidad, motivados por las preguntas acerca de la coherencia, la articulación, la formación profesoral, la proyección y la posibilidad de ser referentes en el entorno.
“El contexto global impone retos muy diferentes a los que durante los últimos años ha tenido que enfrentar la educación como sistema y, particularmente, la educación superior. Con la Reforma Académica nos preguntamos cómo podemos profundizar en los siguientes niveles de acción propuestos por nuestro Proyecto Educativo Institucional”, señaló Herrera.
Intervención Óscar Herrera, vicerrector académico
Para aportar a la construcción de la Reforma, en la primera parte de la jornada se desarrollaron una serie de charlas sobre las implicaciones de plantear una reforma, la importancia de este proceso y los ejes orientadores con los cuales se realizará el trabajo de reestructuración orgánica y pedagógica institucional.
El doctor Rafael Santos Calderón, rector de la Universidad Central, fue el encargado de dar apertura al evento:
“En las acciones permanentes de autoevaluación y autorregulación que adelanta la Institución, se han efectuado ejercicios de reflexión y revisión que han llevado a pensar la necesidad de aunar esfuerzos de toda la comunidad académica para diseñar, durante este año y parte de 2019, una Reforma Académica que permita ajustar y articular los principios, las políticas, las estrategias y los logros de la Universidad”.
Intervención de Rafael Santos Calderón, rector
Investigación formativa
Carlos Augusto Hernández, uno de los expertos invitados, destacó en su intervención el papel de la investigación formativa en la articulación de procesos de formación, investigación e interacción social.
“La investigación formativa implica el análisis sistemático de la práctica pedagógica realizada por los docentes, el trabajo en equipo entre los docentes y estudiantes que asumen un problema con rigor, así como los trabajos de grado”.
En cuanto a la Universidad Central, el profesor Hernández comentó que en la Institución la investigación se dirige hacia proyectos pedagógicos que desarrollan la capacidad de analizar y solucionar problemas de la sociedad.
Por último, comentó que la Reforma Académica en la que se está trabajando implica una transformación de las pedagogías, en la formación en el aula y fuera de ella, la necesidad de formular problemas interesantes y pertinentes, y trabajar de forma interdisciplinar.
Programas de Acción Universitaria (PRAU)
Gloria Alvarado, exdecana de la Facultad de Ciencias Sociales, Humanidades y Arte de la UC, explicó que los Programas de Acción Universitaria (PRAU) articulan la interacción social, la formación en investigación, la investigación formativa, la investigación propiamente dicha e integran el trabajo interdisciplinario y la producción textual.
“Se necesitan programas de acción que permitan esclarecer la naturaleza y resaltar el interés en producir conocimiento”, detalló la docente Alvarado, y agregó que para la Reforma Académica que adelanta la UC se proponen tres PRAU: Gestión Integral del Territorio, Productividad con Desarrollo Humano y Reconstrucción de los Lazos Sociales y Culturales.
Los PRAU permiten articular la interacción social, la formación en investigación, la investigación formativa, la investigación propiamente dicha, la docencia de pregrado y posgrado, e integrar el trabajo interdisciplinario y la producción textual.
“Es necesario cambiar para hacer las cosas mejor”
Mario Díaz Villa, otro de los invitados a la jornada, habló sobre las implicaciones e impactos de las reformas académicas.
Según el experto, una reforma consiste en generar una nueva cultura institucional que no solo sea el fundamento de nuevas prácticas, sino también el fundamento de nuevas actitudes de los actores institucionales.
Para avanzar hacia una Reforma Académica es necesario pensar en tres aspectos claves: conceptual, metodológico y procedimental; con el fin de entender cuáles serán las consecuencias pedagógicas y administrativas. Entre los retos de este proceso de construcción está lograr que todos los actores de la Institución participen y sean proclives al cambio que se propone.
“Es necesario cambiar para hacer las cosas mejor. Pensar una Reforma es un excelente propósito y considero loable esta labor de la Universidad Central, espero que se dé de forma participativa y concertada, para concretar acciones que guíen el quehacer de la Institución”, añadió el profesor Díaz.
Mesas de trabajo
En la segunda parte de la jornada se conformaron cinco mesas de trabajo que discutirán, durante los próximos meses, y apoyados en preguntas clave, las siguientes líneas y ejes temáticos:
- Virtualidad: ¿cuál es el papel de las tecnologías como estrategia de apoyo a la formación?
- Investigación: ¿cuál es el sentido de avanzar hacia una Universidad de docencia con investigación?
- Humanidades y ética: ¿cuál debe ser el papel de la formación humanística y ética en el contexto de la formación universitaria?
- Interacción social y regionalización: ¿cuál es el sentido y las posibilidades de la interacción social en un contexto de regionalización?
- Reforma Académica: línea transversal que integrará los asuntos curriculares con los diferentes componentes abordados por las otras cuatro líneas de trabajo.
“Estas preguntas están relacionadas con los modos en que podemos asumir y aportar de forma más significativa y clara a las demandas que nos impone la realidad actual; todo ello, de acuerdo con nuestras capacidades intelectuales y en correspondencia con las apuestas de nuestro PEI”, agregó el vicerrector Herrera.
Apuesta por la calidad
Durante su intervención, Magda Méndez, directora de Calidad para la Educación Superior del Ministerio de Educación Nacional, afirmó que para 2018 se espera que el 20 % del total de universitarios se encuentren en instituciones y programas de alta calidad.
Por esta razón, cobra gran importancia la apuesta de la UC por consolidar sus proyectos educativos a través de la generación de espacios de reflexión académica, contemplar las tendencias, los retos de la formación y la pertinencia de los programas en el contexto actual.
“Felicitamos a la comunidad académica de la Universidad Central comprometida con su misión institucional y con mantener el compromiso de calidad sobre todos los procesos y programa que desarrolla”, destacó Méndez.