Desde que los páramos fueron declarados patrimonio global en 1992, los esfuerzos por conocerlos y conservarlos se han incrementado.
Fue durante la Cumbre de la Tierra realizada en Río de Janeiro en 1992, cuando los páramos fueron declarados patrimonio global. En Colombia, estas zonas son escenario de diversas dinámicas sociales, pues mientras algunos páramos han sido habitados por comunidades por más de un siglo, el auge de la llamada 'Locomotora de la Minería' empieza a generar preocupaciones no solo ambientales sino socioculturales; frente a este panorama se desarrolló el primer Seminario de Investigación de la Facultad de Ciencias Sociales Humanidades y Artes del 2013 llamado Pobladores Tradicionales de Páramo, en la Universidad Central.
El grupo de investigación Cultura e Identidades conformado por Pilar Lozano directora del IESCO, y los profesores Francisco Ortiz, Edinson Bohórquez, Yolima Devia y Jorge Sánchez, propone una visión interdisciplinar del tema que incluye el papel que juegan aspectos como los saberes tradicionales de los pobladores o la posibilidad de ejercer una minería responsable con el ecosistema.
Para esto fue necesario un trabajo de campo que permitiera comprender las condiciones de vida en la alta montaña, los miedos de los pobladores frente a la intervención del sector minero y su impacto ambiental específicamente en dos escenarios: el paramo de Rabanal, ubicado en el altiplano cundiboyacense, y el Paramo de La Rusia en el departamento de Santander.
Allí, se evidenció la influencia del mito en las prácticas culturales del los pobladores de páramo, que en su mayoría comparten creencias resultado de la mezcla entre el conocimiento indígena y la religión católica.
Así mismo, la investigación ha permitido analizar el dilema que enfrentan algunas comunidades por el creciente sentimiento de desolación a medida que aumenta la inversión en extracción de recursos mineros, y el desinterés de las nuevas generaciones de pobladores por conservar y vivir de lo que el ecosistema les ofrece.
Por último, el doctor Carlos Luis del Cairo, director de la carrera de Antropología de la Universidad Javeriana, hizo los comentarios respectivos a los expositores y resaltó la habilidad del grupo para asociar diversas ramas del conocimiento con el fin de comprender una problemática que ha sido poco trabajada por la academia.
