Implementa estas 6 pautas y desarrolla un portafolio que consolide tus trabajos y experiencias más representativas para enfrentarte al mundo laboral.
Consolidar tu perfil profesional es una labor que puedes ir desarrollando, incluso, desde antes de tener experiencia o tu diploma. Un elemento necesario que te ayudará a tener este insumo es tener tu portafolio para demostrar tus habilidades y conocimientos.
Un portafolio te permite recopilar en un mismo documento las evidencias de los trabajos que has realizado y que consideras que por sí solos demuestran tus capacidades para despertar interés en reclutadores de talento humano o empresas que puedan estar interesadas en perfiles profesionales como el tuyo.
En la actualidad es común que los portafolios estén en formato digital y que incluyan una serie de recursos gráficos y escritos, todo depende de tu carrera y de lo que quieras destacar. Aquí te compartimos 6 consejos de cómo puedes consolidar tu propio portafolio.
Dependiendo de tu carrera define la mejor manera de mostrar tu trabajo.
Hay muchas clases de portafolios y tú debes escoger el que más se ajusta a tu perfil: si eres escritor puedes recopilar tus textos más destacados; si eres músico usa tus pistas, audios o interpretaciones; los publicistas pueden reunir en un mismo espacio aquellas campañas o ideas más creativas, y los cineastas deben compilar sus cortos, videos y guiones.
Lo más importante es que identifiques aquellos trabajos que realmente quieres destacar y mostrar al mundo, escoge solo los mejores y que se ajusten a tu perfil.
Escoge la plataforma o formato adecuado
Hay una gran variedad de plataformas que te permiten aprovechar al máximo sus formatos para destacar de la mejor manera tus trabajos.
Puedes usar herramientas virtuales que en su versión gratuita te permitan subir audios, videos, crear blogs o incluso aprovechar tu canal de YouTube o tu perfil de LinkedIn para cargar este contenido, consolidando todo en un mismo lugar. Además, tendrás la facilidad de compartirlo a través de un enlace en cualquier momento.
Define tu estilo
Aunque hay muchas plataformas que ya tienen un formato predeterminado, puedes darle un toque personal a tu contenido para que vaya en consonancia con tu estilo, como escoger paletas de color y tipografías acordes a lo que quieres demostrar. Puedes inspirarte, buscar referencias en internet y establecer lo que más se ajuste a tu personalidad y a tu perfil.
Describe tus obras
Acompaña la evidencia de tus trabajos con una breve reseña en la que pongas en contexto a tus lectores. Aprovecha el storytelling y usa herramientas que generen intriga y conexión con las otras personas.
Habla de ti
Agrega a tu portafolio un breve perfil en el que cuentes quién eres, a qué te dedicas y cómo contactarte. Seguramente quien se interese en tus obras tendrá la curiosidad de saber quién es el autor y qué tiene por contar de sí mismo.
El portafolio es un complemento
Aunque en esta herramienta recopilas de manera más detallada las evidencias de tu experiencia, recuerda que este documento es un complemento a tu hoja de vida, el insumo que normalmente piden las empresas en sus procesos de selección. Sin embargo, en muchas ofertas de trabajo, y según el perfil, es común que te pidan un portafolio en profesiones como cine, música, publicidad, comunicación social o creación literaria.
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